El moko del plátano, una amenaza silenciosa, está afectando gravemente a los productores de la provincia de Manabí, especialmente en la zona de El Carmen, el principal centro de producción en Ecuador.

Eduardo Manrique, director ejecutivo de Asoexpla, expresó su preocupación ante la persistente amenaza del moko en El Carmen. “A pesar de la significativa reducción en la producción el año pasado, no se observa una respuesta efectiva por parte de las autoridades, lo que genera inquietud entre los pequeños productores que carecen de ciclos adecuados de fumigación y fertilización”, señaló.

Asoexpla ha propuesto soluciones y colaborado con la Espol para obtener fondos destinados a combatir el moko. Sin embargo, Manrique destacó la falta de seguimiento por parte de algunos productores a pesar de las capacitaciones ofrecidas. Aunque hay fruta en el mercado, la situación se complica con la llegada del invierno, añadió.

Actualmente, toda la iniciativa proviene del sector privado, junto con la buena intención de Agrocalidad, que ha realizado algunas capacitaciones. No obstante, Manrique enfatiza la necesidad de un compromiso más sólido por parte de las autoridades para evitar que el moko afecte aún más la productividad, la canasta básica familiar y la tradición culinaria del país. La comunidad espera medidas concretas y una gestión integral para salvaguardar la vitalidad del sector platanero en Ecuador.

Según el directivo, no hay ningún plan emergente ni una gestión visible con la intención de solucionar este problema. “La producción ha disminuido. El año pasado hubo una caída significativa, probablemente estábamos con una oferta de no más del 20%, una productividad de caja por hectárea al año”, afirmó.

Rubén Muñoz, técnico de la Federación de Plataneros, recalcó que el moko avanza cada vez más debido a la falta de conciencia y conocimiento de los productores, quienes no comprenden el daño que causa la enfermedad. “Se han realizado capacitaciones por parte de la Federación y Agrocalidad, y se ha informado a los productores para evitar la propagación. En la zona de El Carmen, la enfermedad se ha expandido casi por todo el sector, y hay productores que tienen la enfermedad y no lo saben, lo que ha disminuido la cantidad de cajas. Es una enfermedad muy fuerte que puede acabar con la producción, y ya hay productores que han cambiado de cultivo”, destacó.

La recomendación es tratar la planta, realizar labores culturales, aislar las plantas enfermas y seguir el protocolo necesario al entrar a la plantación.

Para apoyar a los agricultores, El PRODUCTOR.COM informó que la empresa Meristems S.A. ha introducido una prueba rápida para la detección temprana de la enfermedad. Fran Grandes, gerente de la empresa, explicó que es una prueba similar a la utilizada para el COVID-19 y las pruebas de embarazo. Con estas pruebas, los agricultores podrán saber cómo actuar en sus plantaciones. 

Fuente: El Productor