El plátano ocupa un lugar fundamental en la canasta familiar ecuatoriana, solo superado por el arroz. A pesar de ser un cultivo vital para muchos pequeños productores en el país, enfrenta desafíos que impiden alcanzar la estabilidad necesaria para superar los volúmenes de exportación del banano.

Factores como la inseguridad, la presencia del moko y la falta de capacitación han impactado negativamente en los rendimientos, disminuyendo la calidad y, en consecuencia, las exportaciones. A pesar de su potencial como generador de divisas y componente esencial en la canasta básica nacional, el plátano se ve afectado por diversas problemáticas.

Según Eduardo Manrique, director ejecutivo de la Asociación de Exportadores de Plátano (Asoexpla), la situación actual en Ecuador es complicada debido a varios factores, incluida la enfermedad del moko que ha afectado significativamente a las plantaciones en la zona de El Carmen, con una respuesta insuficiente por parte de las autoridades.

Manrique destaca que la demanda internacional de plátano fresco ha disminuido, afectando al sector platanero ecuatoriano. La calidad ha sufrido debido a la incidencia de la enfermedad, y muchos exportadores han dejado de adquirir plátano ecuatoriano por temor al rechazo por parte de los compradores.

Ante estos desafíos, se ha incentivado la siembra de plátano en otras regiones del país, como Guayas, la Península y Santo Domingo de los Tsáchilas. La siembra tecnificada y semi-tecnificada se considera una estrategia para revitalizar el sector.

Manrique subraya la necesidad urgente de contar con un catastro actualizado que incluya información sobre las hectáreas cultivadas, las variedades de plátano, el número de productores y las zonas de cultivo. Además, solicita a las autoridades declarar en emergencia al sector y trabajar en medidas para mejorar la productividad.

A pesar de los desafíos, existen oportunidades para exportar plátanos ecuatorianos, generando divisas. Manrique hace un llamado a que las autoridades reconozcan el potencial del cultivo y tomen medidas para impulsar su crecimiento, declarando en emergencia al sector y adoptando programas específicos.

En cuanto a las negociaciones con las autoridades actuales, se busca implementar programas y obtener recursos para impulsar el sector del plátano. Manrique destaca que, a diferencia del banano, el plátano no genera desperdicios significativos, y su potencial como generador de divisas aún no ha sido completamente reconocido por las autoridades.

Fuente: El Productor TV